EN
NUESTRO COLE LOS NIÑOS APRENDEN CON PROYECTOS
Con
los proyectos, los niños construyen sus propios aprendizajes, la tarea del
maestro y maestra consiste en ofrecerles recursos y actividades que se ajusten
a sus intereses y que les permitan pensar, investigar y ser más partícipes de
su educación, todo esto recuerda a una frase de Benjamín Franklin que dice:
"Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo".
Todo esto, lleva a crear unas nuevas directrices a la hora de entender la
educación de los más pequeños.
·Nuestros
alumnos se convierten en niños que piensan, que deducen, que extraen
conclusiones a través de sus propios aciertos y errores.
·Así pues, debemos tener claro que
los maestros no son meros transmisores de conocimientos, sino que enseñan a
nuestros pequeños a pensar, mediante la creación de conflictos y dudas para que
ellos vayan extrayendo sus conclusiones y llenando su "mochila del
saber".
·La lectoescritura, ya no es una
enseñanza de códigos y alfabetización, sino que adquiere un concepto mucho más
amplio, entendiéndola como una parte importante del Mundo que nos rodea. Es
decir, ya no se enseña a leer por leer, o a escribir por escribir, sino que se
crea una motivación mediante la cual nuestros alumnos quieren aprender para
saber más.
·La lógico-matemática ya no se
reduce a actividades de numeración y adquisición de conceptos y operaciones,
sino que aprendemos que nuestra vida está llena de esos números que adquieren
un sentido en todo lo que nos rodea.
·Todos los aprendizajes quedan
interrelacionados bajo el principio de globalización de la enseñanza. Todos los
conceptos y actitudes, valores y normas que adquirimos a través de los
procedimientos, están generados por una misma motivación que se ajusta a la
realidad que viven los niños, así como a sus inquietudes.
·Permitimos que sean los propios
alumnos los que vayan guiando su proceso de enseñanza-aprendizaje
involucrándose en el mismo.
Así
pues, podemos definir proyecto como aquella metodología que parte de la
curiosidad nata del niño, la cual le lleva al descubrimiento y al conocimiento
significativo a través de la realización de tareas reales. El alumno alcanza un
papel totalmente activo, siendo el maestro el guía del proceso de
enseñanza-aprendizaje que partirá siempre de la motivación de los niños.
Pero
trabajar por proyectos tiene también otra ventaja muy importante y algo
olvidada en la educación actual y es la implicación de las familias en el mundo
escolar. Un proyecto no tiene sentido sin las familias. Los padres deben ayudar
a sus hijos a extraer conclusiones, a encontrar información para satisfacer a
su curiosidad, a crear estrategias para poder establecer los principios de sus
aprendizajes, a implicarse de manera activa en el proceso de
enseñanza-aprendizaje... Así pues, establecemos un vínculo
familia-escuela muy importante, gracias al cual, los niños sentirán que
cualquier momento y espacio es bueno para aprender, viendo a sus padres como
portadores de un sinfín de conocimientos que les permitirán compartir con sus
compañeros sintiéndose importantes, a la par que se establecerán unas
relaciones mucho más sólidas y duraderas basadas en el respeto, el cariño y la
ayuda mutua.
Estas
relaciones también se establecerán entre los compañeros del aula. El trabajo en
equipo adquiere una gran relevancia en espacio escolar. La confianza, el
respeto y el compañerismo inundarán nuestras aula, consiguiendo sentirnos un
equipo, una pequeña familia educativa...